domingo, 17 de agosto de 2008

Evocaciones de la naturaleza

Es natural que se vea hacia las raíces que los citadinos hemos perdido, esa mirada hacia la naturaleza con la que solo la encontramos como un tapete de pasto o un arbusto que se ha convertido en mueble cuando lo transformamos en un cubo verde que adorna lo largo de nuestra acera.

A mi me gustan los irreverentes árboles y plantas que se cuelan entre las fisuras de la banqueta y los edificios y que luego la agrietan y la levantan dando paso a la vida por la vida misma,por que es como un artista que se impone entre toda la multitud aborregada que inunda nuestras ciudades con olor a humano.

Esta es una opinion que como escultor trato de llevar a mi obra y que se enriquecerá con las opiniones de quien vea y comparta comentarios sobre ésta y las elucubraciones en torno a la volumétrica pasión por los materiales.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me gustan esas plantas que no piden permiso para estar, que viven donde quieren vivir, que se trepan o crecen para poder sentir mejor el sol.